Retrato de un Hombre de Francis Newton Souza Vendido por 1.470.000 €


Retrato de un hombre, Francis Newton Souza, 1956 óleo sobre tabla
"Retrato de un hombre" de Francis Newton Souza alcanzó la sorprendente cifra de 1.470.000 € en la subasta de Bukowski en Estocolmo, superando ampliamente su estimación inicial de 135.000-180.000 €. Este precio la convierte en la pieza de Souza más valiosa jamás vendida en Europa. Amanda Wahrgren, especialista en arte moderno de Bukowskis, expresó su satisfacción con el resultado: “Estoy increíblemente feliz con el precio final de este fantástico retrato de Souza. Con numerosos postores en línea y por teléfono, los resultados de hoy consolidan la posición de Bukowskis en el mercado internacional de subastas”.
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Priya Singh, directora de ventas de arte moderno y contemporáneo del sur de Asia de Bonhams, también destacó la importancia de esta venta: “Este es un retrato sensacional de un artista célebre por su estilo crudo e intenso. No me sorprende el interés de los coleccionistas de todo el mundo. Las obras de FN Souza resuenan en todo el mundo”. Francis Newton Souza nació en 1924 en Goa, India, y se trasladó con su madre a Bombay durante su infancia, donde asistió a una escuela dirigida por sacerdotes jesuitas. La iconografía religiosa que encontró allí influyó significativamente en su estilo artístico.
En 1947, Souza cofundó el Grupo de Artistas Progresistas (PAG) junto a otros artistas de vanguardia. Este grupo buscaba fusionar la cultura clásica de la India con técnicas occidentales innovadoras, jugando un papel crucial en el desarrollo del arte moderno en India. En 1949, Souza se mudó a Londres en busca de un público más liberal. Su primera exposición individual en la Gallery One de Victor Musgrave en 1955 fue un éxito rotundo, consolidando su posición en la escena artística de Londres.

A lo largo de su carrera, Souza exploró varios estilos, pero sus pinturas figurativas con líneas negras definidas de los años 50 y 60 son las más demandadas. La obra de 1956, inspirada en el retrato medieval y renacentista, fue llevada a Suecia por Souza mientras viajaba de Alemania a Londres. Una exposición improvisada en la galería St Nicolaus de Estocolmo recibió duras críticas, lo que llevó a Souza a deshacerse de muchas de sus obras en Suecia, haciendo que las piezas supervivientes fueran especialmente raras y valiosas.
La reacción a su exposición en Estocolmo subraya cómo Souza se adelantó a su tiempo. Sus retratos intensos y emotivos, como “Retrato de un hombre” (1956), capturan la esencia de sus sujetos de manera cruda y sin filtros. Estos retratos no solo representan el parecido físico, sino que profundizan en las emociones internas y estados psicológicos. Hoy en día, Souza es celebrado como uno de los artistas modernos más influyentes de la India y de su época.
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